CUENTAN QUE 2...
Habìa una vez un rey al que le gustaba saberse poderoso y deseaba que a su alrededor todos lo admiraran por su poderìo.Llamò un dìa a un sabio de la corte para preguntarle si habìa alguien màs poderoso que èl en el planeta,y el sabio lè dijo:que se habìa enterado que vivìa en el poblado un mago cuyo poder nadie màs que èl poseìa:sabìa el futuro.El rey hirviò de celos y empezò a preguntar sobre èste mago.Un dìa cansado de que lè contaran lo poderoso y querido que era el mago,el rey urdiò un plan:invitarìa al mago a una cena y delante de los cortesanos lè preguntarìa en què fecha morirìa el mago que habìa llegado al reino.En el momento que respondiera,lo matarìa con su propia espada para demostrar que el mago se habìa equivocado en su predicciòn.Se acabarìan en una sola noche,el mago y el mito de sus poderes...El dìa del festejo llegò,y despuès de la gran cena,el rey hizo la pregunta:¿Es cierto que puedes leer el futuro?-Un poco-dijo el mago-¿Cuàndo morirà el mago del reino?,el mago sonriò,lo mirò a los ojos y contestò-Un dìa antes que el rey.Al oir aquella respuesta,el rey no solo no se atreviò a matarlo,sino que temeroso de que le pasara algo,lo invitò a quedarse en el palacio con la excusa de que necesitaba un consejero sobre màs decisiones reales.Por la mañana,el rey mandò a llamar a su invitado.Para justificar su permanencia le hizo una pregunta,y el mago,que era un sabio,lè diò una respuesta correcta,creativa y justa.El rey alaba a su huesped por su inteligencia y lè pidiò que se quedara un dìa màs y luego otro màs.Todos los dìas el rey se tomaba el tiempo de charlar con el mago para confirmar que estaba vivo,y para hacer alguna pregunta.Sentìa que los consejos de su nuevo asesor eran tàn acertados que terminò casi sin notarlo,tenièndolos en cuenta en todas sus decisiones.Pasaron los meses y los años,y como siempre estar cerca del que sabe vuelve al que no sabe màs sabio...Asì el rey se fuè volviendo poco a poco màs justo y dejò de necesitar sentirse poderoso.Reinò de un modo bondadoso y el pueblo empezò a quererlo.Yà no consultaba al mago con la idea de investigar su salud,realmente iba para aprender.Y con el tiempo el rey y el mago llegaron a ser excelentes amigos.Hasta que un dìa,a cuatro años de aquella cena,el rey recordò que el mago a quièn consideraba ahora su mejor amigo,habìa sido su màs odiado enemigo.Y recordò el plan urdido para matarlo.Como no podìa ocultar ese secreto,sim sentirse un hipòcrita,tomò coraje,golpeò la puerta del mago y apenas entrò le dijo:-Tengo algo para contarte,mi querido amigo,algo que me aprime el pecho.-Dime-dijo el mago y alivia tu corazòn-Aquella noche,cuando te invitè a cenar y te preguntè sobre tu muerte,yo no querìa saber tu futuro,planeaba matarte ante cualquier respuesta que me dieras,querìa que tu muerte desmitificara tu fama.Te odiaba porque todos te amaban...Estoy tàn avergonzado...El mago le dijo:-Has tardado mucho en decìrmelo,pero me alegra porque me permite decirte que yà lo sabìa.Era tàn clara tu intenciòn que no hacìa falta ser adivino para saber lo que ibas a hacer...pero como justa devoluciòn a tu sinceridad debo confesarte que yo tambièn te mentì.Inventè esa absurda historia de mi muerte antes que la tuya para darte una lecciòn,que recièn hoy estàs en condiciones de aprender:Vamos por el mundo odiando y rechazando aspectos de los otros,y hasta de nosotros mismos,que creemos despreciables,amenazantes e inùtiles...y sin embargo si nos damos tiempo,terminamos viendo lo mucho que nos costarìa vivir sin aquellas cosas que en un momento rechazamos.Nuestras vidas estàn ligadas por la amistad y la vida,no por la muerte.El rey y el mago se abrazaron y festejaron brindando por la confianza de esa relaciòn que habìan construido juntos.Cuenta la leyenda,que esa misma noche,misteriosamente el mago muriò mientras dormìa y que al enterarse el rey cavò con sus propias manos un pozo en el jardìn,justo debajo de sù ventana y que allì se quedò llorando al lado del montìculo de tierra,hasta que agotado por el llanto y el dolor volviò a su habitaciòn.Cuenta la leyenda que esa misma noche,veinticuatro horas despuès de la muerte del mago,el rey...muriò en su lecho mientras dormìa.Quizàs por casualidad...Quizàs de dolor...Quizàs para confirmar la ùltima enseñanza del maestro.
CUENTAN QUÈ...
Martìn habìa vivido gran parte de su vida con intensidad y gozo.De alguna manera su intuiciòn lo habìa guiado cuando su inteligencia fallaba en mostrarle el mejor camino.Casi todo el tiempo se sentìa en paz y feliz,ensombrecìa su ànimo,algunas veces,esa sensaciòn de estar demasiado en funciòn de sì mismo.Èl habìa aprendido a hacerse cargo de sì y se amaba suficientemènte como para intentar procurarse las mejores cosas.Sabìa que hacìa todo lo posible para cuidarse de no dañar a los demàs,especialmente a aquellos de sus afectos.Quizàs por eso le dolìan tanto los señalamientos injustos,la envidia de los otros o las acusaciones de egoista que recogìa demasiado frecuentemente de boca de extraños y conocidos.¿Alcanzaba para darle significado a su vida,la busqueda de su propio placer?,¿Soportaba èl mismo definirse como un hedonista,centrando su existencia en su satisfacciòn individual?,¿Còmo armonizar èstos sentimientos de goce personal con sus concepciones èticas,con sus creencias religiosas,con todo lo que habìa aprendido de sus mayores?,¿què sentido tenìa una vida que sòlo se significaba a sì misma?,Ese dìa mas que otros,esos pensamientos lo abrumaron.Quizàs debìa irse,partir,dejar lo que tenìa en manos de los otros,repartir lo cosechado y dejarlo de legado para aunque sea en ausencia,ser en los demàs un buen recuerdo.En otro paìs,en otro pueblo,en otro lugar,con otra gente,podrìa empezar de nuevo.Una vida diferente,una vida de servicio,a los demàs,una vida solidaria.Debìa tomarse el tiempo de reflexionar sobre su presente y sobre su futuro.Martin puso unas pocas cosas en su mochila y partiò en direcciòn al monte.Le habìan contado del silencio de la cima y de como la vista del valle fèrtil ayudaba a poner en orden los pensamientos de quièn hasta allì llegaba.En el punto màs alto del monte girò para mirar su ciudad,quizàs por ùltima vez.Atardecìa y el poblado se veìa hermoso desde allì-por un peso te alquilo el catalejo.Era la voz de un viejo que apareciò desde la nada con un pequeño telescopio plegable entre sus manos y que ahora lè ofrecìa,con una mano,mientras con la otra tendida hacia arriba,reclamaba su moneda.Martin encontrò en su bolsillo la moneda buscada y se la diò al viejo que desplegò el catalejo y se lo alcanzò.Despuès de un rato de mirar,consiguiò ubicar su barrio,la plaza,y hasta la escuela frente a ella.Algo lè llamò la atenciòn.Un punto dorado brillaba intensamente en el patio del antiguo edificio,Martin separò sus ojos del lente,parpadeò algunas veces,volviò a mirar.El punto dorado seguìa allì-Què raro-exclamò Martin sin darse cuenta de que hablaba en voz alta-¿Què ès lo raro?-preguntò el viejo-el punto brillante-dijo Martin-ahi en el patio de la escuela-siguiò alcanzàndole al viejo el telescopio para que viera lo que èl veìa-Son huellas-Dijo el anciano-¿Què huellas?-preguntò Martin-Te acordàs de aquèl dìa...debìas tener 7 años,tu amigo de la infancia,Javier,lloraba desconsolado en ese patio de la escuela.Su madre le habìa dado unas monedas para comprar un làpiz para el primer dìa de clases.Èl habia perdido el dinero y lloraba a mares,contestò el viejo.Y despuès de una pausa,siguiò-¿Te acordàs de lo que hicistes?,tenìas un lapiz nuevito que estrenarìas ese dìa.Te arrimaste al portòn de entrada y cortastes el lapiz en dos partes iguales,sacaste punta a la mitad cortada y le diste el nuevo lapiz a Javier-No me acordaba-dijo Martin,pero eso,¿què tiene que ver con el punto brillante?-Javier nunca olvidò ese gesto y ese recuerdo sè volviò importante en su vida.-¿Y?-Hay acciones en la vida de uno que dejan huellas en la vida de otros-explicò el viejo-,las acciones que contribuyen al desarrollo de los demàs,quedan marcadas como huellas doradas...Volviò a mirar por el telescopio y viò otro punto brillante en la vereda a la salida del colegio-Ese ès el dìa que saliste a defender a Pancho,¿Te acordàs?,Volviste a casa con un ojo morado y un bolsillo del guardapolvo arrancado,Martin miraba la ciudad.-Ese que està ahi en el centro-Siguiò el viejo-ès el trabajo que le conseguiste a Don Pedro cuando lo despidieron de la fàbrica...y el otro,el de la derecha,ès la huella de aquella vez que juntaste el dinero que hacìa falta para la operaciòn del hijo de Ramirez...las huellas esas que salen a la izquierda son de cuando volviste del viaje porque la madre de tu amigo Juan habìa muerto y quisiste estar con èl.Apartò la vista del telescopio y sin necesidad de èl empezò a ver como miles de puntos dorados aparecìan desparramados por toda la ciudad.Al terminar de ocultarse el sol,todo el pueblo parecìa iluminado por sus huellas doradas.Martin sintiò que podìa regresar sereno a su casa.Su vida comenzaba de nuevo,desde un lugar distinto.
LA TRISTEZA Y LA FURIA.
Cuentan que...A un estanque màgico llegaron una vez a bañarse hacièndose mutua compañìa la tristeza y la furia.Llegaron junto al agua,se sacaron las ropas y desnudos entraron a bañarse.La furia apurada,como siempre inquieta sin saber porquè se bañò,y rapidamente saliò del estanque.Pero como la furia es casi ciega se puso la primer ropa que manoteò,que no era la suya sino la de la tristeza.Vestida de tristeza la furia se fuè como si nada pasara.La tristeza,tranquila,y serena,tomàndose el tiempo del tiempo,como si no tuviera ningùn apuro,porque nunca lo tiene,mànsamente se quedò en el agua,bañàndose mucho rato,y cuando terminò,quizàs aburrida del agua,saliò y se diò cuenta de que no estaba su ropa.Si hay algo que la tristeza no le gusta,es quedar al desnudo,asì que para no estar asì,al descubierto,se puso la ùnica ropa que habìa,la ropa de la furia.Y asì vestida de furia siguiò su camino.Cuentan què a veces cuando uno ve al otro furioso,cruel,despiadado,y ciego de ira,parece que estuviera enojado,pero si uno se fija con cuidado se dà cuenta de que la furia es un disfràz y que detràs de esa furia salvaje se esconde en realidad la tristeza./BUCAY/
CUENTAN QUE...
Habìa una vez una isla donde habitaban todas las emociones y todos los sentimientos humanos,que existìan,convivìan por supuesto,el temor,el odio,la sabidurìa,el amor,la angustia,todos estaban ahi.Un dìa,el Conocimiento reuniò a los habitantes de la isla y les dijo:-Tengo una mala noticia para darles:la isla se hunde.Todas las emociones que vivìan en la isla,dijeron:-No,còmo puede ser,si nosotros vivimos aquì desde siempre.El conocimiento repitiò:-La isla se hunde,-pero no puede ser,Quizàs estàs equivocado-Yo nunca me equivoco-aclarò el conocimiento-Si les digo que se hunde,es porque se hunde-Pero¿què vamos a hacer,ahora?-preguntaron los demàs.Entonces el Conocimiento contestò:-Bueno,hagan lo que quieran,pero yo les sugiero que busquen la manera de dejar la isla...hagan un barco,un bote,una balsa,o algo para irse porque en la isla desaparecerà con ella.-¿No podrìas ayudarnos?,-preguntaron todos,porque confiaban en su capacidad,-No-dijo el conocimiento-La previsiòn y yo hemos construido un aviòn y en cuanto termine de decirles èsto,volaremos hasta la isla màs cercana.Las emociones dijeron:-No pero No,¿Y nosotros?Dicho èsto,el conocimiento se subiò al aviòn con su socia y llevando como polizòn al miedo,que como no es zonzo,yà se habìa escondido en el aviòn,dejaron la isla.Todas las emociones se dedicaron a construir un bote,un barco,un velero...todas...salvo el Amor,porque el Amor estaba tàn relacionado con cada cosa de la isla que dijo:-Dejar esta isla...despuès de todo lo que vivì aquì...¿Còmo podrìa,yo dejar este arbolito,por ejemplo...?ahhhh...compartimos tantas cosas.Y mientras cada uno se dedicaba a construir una manera de irse,el Amor se subiò a cada àrbol,oliò cada rosa,se fuè hasta la playa y se revolcò en la arena como solìa hacerlo en otros tiempos,tocò cada piedra...y quizo pensar con èsta ingenuidad que tiene el amor,quizàs se hunda un ratito y despuès...pero la isla...la isla se hundìa cada vez màs.Sin embargo,el Amor no podìa pensar en construir porque estaba tàn dolorido que solo podìa llorar y gemir por lo que perderìa.Y otra vez tocò las piedritas,y otra vez se arrastrò en la arena,y otra vez se mojò los piecitos-Despuès de tantas cosas que pasamos juntos...le dijo a la isla.Y la isla se hundiò un poco màs...Hasta que finalmente,de ella solo quedò un pedacito.El resto habìa sido tapado por el agua.Recièn en ese momento el Amor se diò cuenta de que la isla se estaba hundiendo de verdad y comprebndiò que si no conseguìa irse el amor desaparecerìa para siempre de la faz de la Tierra,asi que entre charcos se dirigiò a la bahìa,que era la parte màs alta de la isla.Fuè con la esperanza de ver desde allì a alguno de sus compañeros y pedirles que lo llevaran.Buscando en el mar viò venir el barco de la riqueza,y le hizo señas,y la riqueza se acercò un poquito a la bahìa,-Riqueza,vos que tenès un barco tàan grande¿no me llevarìas hasta la isla vecina?,Y la Riqueza le contestò:-Estoy tàn cargada de dinero,de joyas,y de piedras preciosas que no tengo lugar para vos.Lo siento-y siguiò su camino sin mirar atràs.El Amor se quedò mirando y viò venir a la vanidad,en un barco hermoso,lleno de adornos,caireles,màmoles y florcitas de todos los colores que llamaban muchisimo la atenciòn.El Amor se estirò un poco y gritò:Vanidad...Vanidad,llevame con vos.La Vanidad mirò al Amor y le dijo:-Me encantarìa llevarte pero...tenes un aspecto...estàs tàn desagradable,sucio y desaliñado...perdòn afearìas mi barco.Y se fuè,y cuando pensò que ya nadie màs pasarìa viò acercarce un barco muy pequeño,el ùltimo,el de la tristeza.-Tristeza,hermana-le dijo--vòs que me conocès tanto,vòs si me vas a llevar,¿verdad?,y la Tristeza le contestò:-Yo te llevarìa,pero estoy tàn triste que prefiero seguir sola,y sin decir màs se alejò.Y el Amor,pobrecito,se diò cuenta que por haberse quedado ligado a èstas cosas que tanto amaba iba a hundirse en el mar hasta desaparecer.Y el Amor se sentò en el ùltimo pedacito que quedaba de su isla a esperar el final...Cuando de pronto escuchò que alguien le chistaba-chst,chst,chst,chst...Era un viejito que le hacìa señas desde un bote de remar.El Amor dijo-¿a mi?-si,si dijo el viejito-a vos,-Venì conmigo,yo te salvo.El Amor lo mirò y dijo:Mirà lo que pasò fuè que yò me quedè.-Yo entiendo-dijo el viejito sin dejarlo terminar-subite yo te voy a salvar.El Amor subiò al bote y empezaron a remar para alejarse de la isla,que en efecto terminò de hundirse unos minutos despuès y desapareciò para siempre.Cuando llegaron a la otra isla,el Amor comprendiò que seguìa vivo,que iba a seguir existiendo gracias a èste viejito,que sin decir una palabra se habìa ido tàn misteriosamente como habìa aparecido.Entonces el Amor se cruzò con la Sabidurìa y le dijo:Yo no lo conozco y èl me salvò,¿como puede ser?,Todos los demàs no comprendìan que me quedara,èl me ayudò y yò ni siquiera se quièn ès...La sabidurìa lo mirò a los ojos y dijo:Èl ès el Tiempo,Amor,es el UNICO QUE PUEDE AYUDARTE,CUANDO EL DOLOR DE UNA PÈRDIDA TE HACE CREER QUE NO PODÈS SEGUIR.
CUENTAN QUÈ...
El rey Arturo habìa enfermado.En tàn solo 2 semanas su debilidad lo habìa postrado en su cama y yà casi no comìa.Todos los mèdicos de la corte fueron llamados para curar al monarca,pero nadie habìa podido diagnosticar su mal.Pese a todos los cuidados,el buen rey empeoraba,una mañana mientras los sirvientes aireaban la habitaciòn donde el rey yacìa dormido,uno de ellos le dijo a otro,con tristeza-Morirà...En el cuarto estaba Sir Galahad,el màs heroico y apuesto de los caballeros de la mesa redonda,y el compañero de las grandes lides de Arturo.Galahad escuchò el comentario del sirviente y se puso de piè,como un rayo,tomò al sirviente de las ropas y lè gritò:-jamàs vuelvas a repetir esa palabra,¿entiendes?,El Rey vivirà,el Rey se recuperarà...Sòlo necesitamos encontrar al mèdico que conozca su mal,¿oiste?,el sirviente temblando se animò a contestar:-Lo que pasa Sir,es que Arturo no està enfermo,està embrujado.Eran èpocas donde la magia era tàn lògica y natural,como la ley de Gravedad.¿Por què dices eso,maldiciòn?,preguntò Galahad.-Tengo muchos años mi señor y he visto decenas de hombres y mujeres en èsta situaciòn,solamente uno de ellos,ha sobrevivido.-Eso quiere decir que existe una posibilidad...Dime como lo hizo ese,el que escapò de la muerte.-Se trata de conseguir un brujo màs poderoso que el que realizò el conjuro,si eso no se hace el hechizado muere.-Debe haber en el reino un hechicero poderoso-Dijo Galahad.-Pero si no està en el reino lo irè a buscar del otro lado del mar y lo traerè.-Que yo sepa hay solamente dos personas tàn poderosas como para curar a Arturo,Sir Galahad,uno es Merlìn,que aùn en el caso de que sè enterara tardarìa dos semanas en venir,y no creo que nuestro rey pueda soportar tanto.-¿Y la otra?,El viejo sirviente bajò la cabeza,movièndola de un lado a otro,negativamente.-La otra ès la bruja de la montaña...pero aùn cuando alguien fuera suficientemente valiente para ir a buscarla,lo cuàl dudo,ella jamàs vendrìa a curar al rey que la expulsò del palacio hace tantos años..La fama de la bruja era realmente siniestra.Se sabìa que era capaz de transformar en su esclavo al màs bravo guerrero,con solo mirarlo a los ojos,se decìa que con solo tocarla se le helaba a uno la sangre en las venas,se contaba que hervìa a la gente en aceite para comerse su corazòn.Pero Arturo era el mejor amigo que Galahad tenìa en su vida,habìa batallado a su lado cientos de veces,habìa escuchado sus penas màs banales,y las màs profundas.No habìa riesgo que èl no corriera por salvar a su soberano,a su amigo,y a la mejor persona que habìa conocido.Galahad calzò su armadura y montando su caballo se dirigiò a la montaña Negra donde estaba la cueva de la bruja.Apenas cruzò el rìo,notò que el cielo empezaba a oscurecerse.Nubes opacas y densas parecìan ancladas al piè de la montaña.Al llegar a la cueva,la noche pareciò haber caido en pleno dìa.Galahad desmontò y caminò hacia el agujero en la piedra.Verdaderamente,el frìo sobrenatural que salìa de la gruta,y el olor fètido que emanaba del interior lo obligaron a re plantear su empresa,pero el caballero resistiò y siguiò avanzando por el piso encharcado y el lùgubre tùnel.De vez en cuando el aleteo de un murcièlago lo llevaba a cubrirse instintivamente la cara.A quince minutos de marcha,el tùnel se abrìa en una enorme caverna impregnada de un olor ocre y de una luz amarillenta generada por cientos de velas encendidas.En el centro,revolviendo una olla humeante,estaba la bruja.Era una tìpica bruja de cuento,tàl y como se la habìa descripto su abuela en aquellas historias de terror que le contaba en su infancia para dormir,y que fantaseaba en la lucha contra el mal que emprenderìa cuando tuviera edad para ser caballero de la corte.Allì estaba,encarnada,vestida de negro,con las manos alargadas y huesudas,terminadas en larguisimas uñas que parecìan garras,los ojos pequeños,la nariz ganchuda,el mentòn prominente,y la actitud que encarnaba el espanto.Apenas Galahad entrò sin siquiera mirarlo la bruja le gritò:-Vete antes de que te convierta en un sapo,o en algo peor-Es que he venido a buscarte-dijo Galahad-Necesito ayuda para mi amigo que està muy enfermo-Je...Je...Je-riò la bruja.El Rey està embrujado y a pesar de que no he sido yo quièn ha hecho el conjuro,nada hay que puedas hacer para evitar su muerte.Pero tù...tù eres màs poderosa que quièn hizo el conjuro.Tu podrìas salvarlo,argumentò Galahad-¿Por què harìa yò tàl cosa?,preguntò la bruja,recordando con resentimiento el desprecio del Rey.Por lo que pidas,dijo Galahad-Me ocuparè personalmente de que se te pague el precio que exijas.La bruja mirò al caballero.Era ciertamente extraño tener a semejante personaje en su cueva pidièndole ayuda.Aùn a la luz de las velas,Galahad era increiblemente apuesto,lo cuàl sumado a su porte,lo convertìa en una imagen de la gallardìa y la belleza.La bruja lo mirò de reojo y anunciò:-El precio es èste:si curo al Rey y solamente si lo curo...Lo que pidas...dijo Galahad-Quiero que te cases conmigo,Galahad se estremeciò,no consebìa pasar el resto de sus dìas conviviendo con la bruja y sin embargo,era la vida de Arturo.¿Cuàntas veces su amigo habìa salvado la suya,durante una batalla?,le debìa no una sino cien vidas...Ademàs,el reino necesitaba de Arturo.-Sea,dijo el caballero,si curas a Arturo te desposarè,te doy mi palabra.Pero por favor,apùrate,temo llegar al castillo y que sea tarde para salvarlo.En silencio,la bruja,tomò una maleta puso unos cuantos polvos y brebajes en su interior,recogiò una bolsa de cuero llena de extraños ingredientes y se dirigiò al exterior,seguida por Galahad.Al llegar afuera,Sir Galahad trajo su caballo y con el cuidado con el que se trata a una reina,ayudò a la bruja a montar en la grupa.Montò a su vez y empezò a galopar hacia el castillo real,una vez en el castillo gritò al guardia para que bajara el puente,y èste con reticencia lo hizo.Franqueado por la gente de aquella fortaleza que murmuraba sin poder creer lo que veìa o se apartaba para no cruzar su mirada con la horrible mujer,Galahad llegò a la puerta de acceso,a las habitaciones reales.Con la mano impidiò que la bruja se bajara por sus propios medios y se apurò a darle el brazo para ayudarla.Ella se sorprendiò y lo mirò casi con sarcasmo.-Si es que vas a ser mi esposa,-le dijo-es bueno que seas tratada como tàl.Apoyada en el brazo de èl,la bruja entrò en la recàmara real.El rey habìa empeorado,desde la partida de Galahad,ya no despertaba ni se alimentaba.Galahad mandò a todos a abandonar la habitaciòn.El mèdico personal del rey pidiò permanecer y Galahad consintiò.La bruja se acercò al cuerpo de Arturo,lo oliò,dijo algunas palabras extrañas y luego preparò un brebaje de desagradable color verde,que mezclò con un junco.Cuando intentò darle a beber el lìquido al enfermo,el mèdico lè tomò la mano con dureza-No dijo-Yo soy el mèdico y no confìo en brujerìas,fuera de...Y seguramente hubiera continuado diciendo...de èste castillo...pero no llegò a hacerlo,Galahad estaba a su lado con la espada cerca del cuello del mèdico,y la mirada furiosa.-No toques a èsta mujer.-Dijo Galahad-Y el que se va eres tù...Ahora-Gritò.El mèdico huyò asustado.La bruja acercò la botella a los labios del rey y dejò caer el contenido en su boca-¿Y ahora?-Preguntò Galahad-Ahora hay que esperar-dijo la bruja.Yà en la noche,Galahad sè quitò la capa y armò con ella un pequeño lecho a los pìes de la cama del rey.El se quedarìa en la puerta de acceso cuidando de ambos.A la mañana siguiente por primera vez,en muchos dias,el Rey despertò-Comida,gritò,Quiero comer...Tengo mucha hambre.-Buenos dias Majestad,saludò Galahad,con una sonrisa mientras hacìa sonar la campanilla para llamar a la servidumbre.-Mi querido Amigo.-dijo el rey-siento tanta hambre como si no hubiese comido en semanas.No comistes en semanas,lè confirmò Galahad.En eso,a los pies de su cama apareciò la imagen de la bruja miràndolo con una mueca que seguramente reemplazaba en ese rostro a la sonrisa.Arturo creyò que era una alucinaciòn cerrò los ojos y se los refregò hasta comprobar,que en efecto la bruja estaba allì,en su propio cuarto.Te he dicho cientos de veces,que no querìa verte cerca del palacio,fuera de aquì,ordenò el rey.-Perdòn Majestad-dijo Galahad-debes saber que si la echas me estàs echando tambièn a mì.Es tu privilegio echarnos a ambos,pero si se và ella,me voy yò.-¿Te has vuelto loco?.-preguntò Arturo-¿Adonde irìas tù con èste mosnstruo infame?-Cuidado alteza,estàs hablando de mi futura esposa.¿QUÈ?¿tu futura esposa?,yo he querido presentarte a las jòvenes casaderas de las mejores familias del reino,a las princesas màs codiciadas de la regiòn,a las mujeres màs hermosas del mundo,y las has rechazado a todas.¿Como vàs ahora a casarte con ella?.La bruja se arreglò burlonamente el pelo y dijo:-Es el precio que ha pagado para que yo te cure.-NO-gritò el Rey-Me opongo.No permitirè èsta locura,prefiero morir.-Està hecho su majestad,-dijo Galahad.Te prohibo que te cases con ella.-Ordenò Arturo-Majestad-contestò Galahad,existe sòlo una cosa en el mundo màs importante para mì que una orden tuya,y ès mi palabra.Yo hice un juramento y me propongo cumplirlo.Si tù te murieses mañana,habrìa dos eventos en un mismo dìa.El Rey comprendiò que no podìa hacer nada para proteger a su amigo de su juramento-Nunca podrè pagar tu sacrificio por mi,Galahad,eres màs noble aùn de lo que siempre supe.-El Rey se acercò a Galahad y lo abrazò,dime aunque sea que puedo hacer por tì?.A la mañana siguiente,a pedido del caballero,en la capilla del palacio,el sacerdote casò a la pareja,con la ùnica presencia de su majestad el Rey.Al final de la ceremonia,Arturo entregò a Sir Galahad su bendiciòn y un pergamino en el que cedìa a la pareja los terrenos del otro lado del rìo y la cabaña en lo alto del monte.Cuando salieron de la capilla,la plaza central,estaba inusualmente desierta,nadie querìa festejar ni asistir a èsta boda,los corrillos del pueblo hablaban de brujerìas,de hechizos,de locura,y de posesiòn...Galahad condujo el carruaje por los ahora desiertos caminos en direcciòn al rìo y de allì por el camino alto hacia el monte.Al llegar,bajò presuroso,y tomando a su esposa amorosamente por la cintura,la ayudò a bajar del carro.Le dijo que guardarìa los caballos y la invitò a pasar a su nueva casa.Galahad se demorò un poco màs porque prefiriò contemplar la puesta del sol hasta que la linea roja terminò de desaparecer en el horizonte.Recièn entonces Sir Galahad tomò aire y entrò.El fuego del hogar estaba encendido y frente a èl una figura desconocida,estaba de piè de espaldas,a la puerta.Era la silueta de una mujer vestida en gasas blancas,semitransparentes,que dejaban adivinar las curvas de un cuerpo cuidado y atractivo,Galahad mirò a su alrededor,buscando a la mujer que habìa entrado unos minutos antes,pero no la viò.-¿Donde està mi esposa?-preguntò.La mujer girò y Galahad sintiò su corazòn casi salìrsele del pecho.Era la màs hermosa mujer que habìa visto jamàs.Alta,de tèz blanca,ojos claros,largos cabellos rubios y un rostro sensual,y tierno a la vez.El caballero pensò que se habrìa enamorado de aquella mujer,en otras circunstancias.-¿Donde està mi esposa?-repitiò,ahora un poco màs enèrgico.La mujer se acercò un poco y en un susurro le dijo:-Tu esposa,querido Galahad,soy yò-No me engañas yò se con quièn me casè-Dijo Galahad,y no se parece a tì en lo màs minimo.-Has sido tàn amable conmigo querido Galahad,has sido cuidadoso y gentil conmigo aùn cuando sentìas que desprecias mi aspecto,me has defendido y respetado,tanto como nadie lo hizo nunca,que te creo merecedor de èsta sorpresa...La mitad del tiempo que estemos juntos tendrè èste aspecto que vès,y la otra mitad del tiempo el aspecto con el que me conociste...la mujer hizo una pausa y cruzò su mirada con la de Sir Galahad.-Y como eres mi esposo,mi amado y maravilloso esposo,es tu privilegio tomar èsta decisiòn.¿Què prefieres esposo mìo?,¿Quieres que sea èsta de dìa y la otra de noche,o la otra de dìa y èsta de noche?,Dentro del caballero el tiempo se detuvo.Este regalo del cielo era màs de lo que nunca habìa soñado.Èl se habìa resignado a su destino por amor a su amigo,Arturo,y allì estaba ahora pudiendo elegir su futura vida.¿Debìa pedirle a su esposa que fuera la hermosa de dìa,para pasearse ufanamente por el pueblo,viendo la envidia de todos y padecer en silencio y soledad la angustia de sus noches con la bruja?,¿O màs bien debìa tolerar las burlas y consolaarse sabiendo que cuando anocheciera tendrìa para èl solo el placer celestial de la compañìa de èsta hermosa mujer de la cuàl yà se habìa enamorado?,Sir Galahad,el noble Sir Galahad,pensò y pensò,y pensò,hasta que levantò la cabeza y hablò:Ya que eres mi esposa,mi amada y elegida esposa,te pido que seas...la que tù quieras ser en cada momento,de cada dìa de nuestra vida juntos...Cuenta la leyenda que cuando ella escuchò èsto,y se diò cuenta de que podìa elegir por si misma,ser quièn ella quisiera,decidiò ser todo el tiempo la màs hermosa de las mujeres.Cuentan que desde entonces cada vez que nos encontramos con alguien que con el corazòn entre las manos nos autoriza a ser quienes somos,invariablemente nos transformamos.Abandonamos para siempre las horribles brujas y los malditos ogros que anidan en nuestra sombra,para que al desaparecer dejen lugar a los màs bellos,amorosos y fascinantes caballeros y princesas que yacen,a veces dormidos,dentro de nosotros.Hermosos seres que al principio aparecen para ofrecerlos a la persona amada,pero que terminan infaliblemente adueñàndose de nuestra vida y habitàndonos permanentemente.Este es el aprendizaje cosechado a lo largo del camino del encuentro.El verdadero Amor no es otra cosa que el deseo inevitable de ayudar a otro paara que sea quièn ès.Mucho màs allà de que sea o no de mì conveniencia.Mucho màs allà de que siendo quièn SOS,ME ELIJAS O NO A MI,PARA CONTINUAR JUNTOS EL CAMINO.Deseo de corazòn que este cuento los UNA,al AMOR de sus vidas,o los ayude a encontrarlo,para que como dice al final:juntos descubran el CAMINO...
Este blog intenta ser un cambio,una transformación humilde,que nos haga reflexionar emocionar pensar agradecer reir unirnos NO pelear más en guerras inútiles,pensar que una nueva humanidad se esta formando,el planeta y el ser humano se transforman poco a poco,espero que este RAYO DE LUZ y AMOR que va a estar en la red les sirva a TODOS.PAZ,AMOR,Y GRACIAS POR SUS VISITAS,Cuando la vida te dè razones para llorar demuèstrale que tienes mil y una razones para reir.
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